Reflejar la dañina estructura patriarcal. Texto y fotos: Salvador Perches Galván.
- eseperches
- 21 may 2022
- 3 Min. de lectura

A partir de archivos y experiencias personales y de distintas exploraciones que se hicieron en un laboratorio en el que participaron unas 25 personas, la mayoría de las cuales tenía fracasos amorosos por no cumplir con los mandatos de los sistemas patriarcal y capitalista, surgió la duda: ¿Cuáles son los constructos socioculturales que han generado la idea del amor y cómo hemos aprendido a amar?.
Esto fue la base con la que se comenzó a construir la dramaturgia, de lo que ahora es Calle amor, surgida a partir del mismo laboratorio de creación.

En palabras de la autora y directora, Laura Uribe, lo que inspiró la creación de esta obra fue cuestionarse desde dónde surge, desde dónde nace y cómo se origina la idea del amor, desde diversas perspectivas.

Catorce personas con universos distintos que se atreven a buscar una respuesta a la pregunta: ¿qué es el amor?, se dan cuenta de que los lazos afectivos que generan son más de uno, agregando a esos lazos, el mundo virtual que sucede hoy en día, lo que comienza a dificultar las catorce conclusiones.

La obra es una radical crítica al sistema patriarcal que romantiza el amor y que ha influido en generaciones de todas las edades. También crítica las prácticas nocivas de abuso y violencia en las artes escénicas, y en todas las prácticas profesionales y no.
Los 14 jóvenes egresados de la Escuela Nacional de Arte Teatral (ENAT), más Rodrigo Virago, formado en el CEA y ya con vasta experiencia en todos los medios, cuestionan y reflexionan desde su experiencia y contexto.
El objetivo del atractivo montaje meta teatral es dejar al público una reflexión en torno a cómo se moldea nuestra subjetividad, de dónde surgen nuestros deseos, cuáles son las herramientas narrativas y las ficciones que han construido nuestra idea del amor, nuestra relación con lo amoroso, nuestro comportamiento amoroso, es una invitación hacia la reflexión afirma Uribe.

En la puesta en escena, con todas las características de ejercicio académico de egreso, sin que esto se entienda de manera peyorativa, muy por el contrario, es decir cargada de aliento fresco y energético. Los jóvenes creadores, comparten sus referentes teatrales, cinematográficos y musicales para ejemplificar sus vivencias personales, familiares, sociales o académicas; de tal forma, la Señorita Julia, de August Strindberg; Woyzeck, de Georg Büchner, y Fuenteovejuna, de Lope de Vega, El rey león, de Walt Disney y otras películas, como El baile de los 41 a la que se hace alusión, y se resuelve de manera muy efectiva, además de hacer visualmente muy atractivo el montaje, en el que resalta la espléndida iluminación, apoyan sus discursos anti todo.

El montaje va del teatro documental, autorreferencial, al musical (hay algunas escenas que nos remites a A chorus line, y otros clásicos del género), con el propósito de reflejar la dañina estructura patriarcal y el sistema capitalista que sólo busca la ganancia económica. Apunta Uribe.

Calle Amor no cuenta una historia lineal; es una obra fragmentada en la que, mediante el recurso del teatro dentro del teatro, les jóvenes egresades de la ENAT comentan, analizan y reflexionan sobre esas ficciones teatrales y cinematográficas.
El MeeToo y las numeralias están presentes en el montaje gracias a los propios participantes así sabemos cuántos hombres, cuantas mujeres, de que edades, de que preferencias sexuales, de que tipo físico, lo que les permite, o no, integrarse a repartos teatrales, cinematográficos o televisivos y a que han tenido que acceder, o no, para ello. Mediante un par de radicales discursos feministas, Julia, Strindberg; María de Woyzeck, Büchner, Laurencia, Lope de Vega, Blanche DuBois, Julieta, Shakespeare, quedan absolutamente descalificades y terminan reducides al nivel de los maniqueos personajes telenoveleros de la peor televisión comercial mexicana.

El teatro es de todos. ¡Asista!
Recomendable.

Calle amor. Idea original: TRESCÉNICA.
Dramaturgia y dirección: Laura Uribe.
Diseño de producción y coordinación general: David Castillo.
Actuación: Ángel Abad, Frida Aranza, Eduardo Arriola, Atenas Cobos, Mario González-Solís, Elizabeth Guajardo, Aurelio Gutiérrez, Erudi Minero, Manuel Mompala, Miguel Ángel Pérez, Aline Reyes Estrella, Rodrigo Virago, Juan Pablo Zavala y Erandi Zenil.
Teatro Julio Castillo. Centro Cultural del Bosque, a espaldas del Auditorio Nacional.
Metro y metrobus Auditorio.
Sábado 19 horas, domingo 18 horas. Hasta el 22 de mayo.




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