top of page
Buscar
  • eseperches

El suyo, podría representar el caso más grave. Texto y fotos: Salvador Perches Galván.







El teatro es el espejo donde nos reflejamos todos.

John Merrick.






A finales de la década de los 70’s del siglo pasado, John Merrick vuelve a alcanzar notoriedad, en ese entonces a nivel internacional, como nunca lo pudo haber imaginado en el Londres de 1884, cuando el entusiasmo de la población por los monstruos llegaba a su pico más alto. El más famoso entre ellos es sin duda Merrick, alias “El hombre elefante”, exhibido como una bestia por sus deformidades físicas extraordinarias.

En aquella época a este tipo de gente los trataban como monstruos de feria y Merrick vivía como un animal, rebajando su condición humana, exponiéndoles para la burla, el escarnio, la repulsión y el rechazo de los espectadores, eran explotados y percibían una mísera paga. John Merrick tenía todo para haberse convertido en una persona miserable por dentro y resulta que, al interior de esa fachada terrible, habitaba un ser exquisito en bondad, generosidad, sensibilidad, inteligencia y ganas de vivir.

El hombre elefante presenta uno de esos pavorosos fenómenos, que, afortunadamente, no abundan en la naturaleza, pero por quienes las multitudes demuestran una enfermiza curiosidad, cuando no los hacen víctimas de crueles maltratos. John Merrick, cuando llegó a los 21 años, ya conocía ambas manifestaciones. Su “dueño”, por dos peniques, lo exhibía en circos del Londres de 1884. Su numeroso público estuvo varias veces a punto de lincharlo por considerarlo una ofensa a la humanidad, al hombre hecho a la imagen y semejanza de Dios.

Si en el medioevo se consideraba a los locos producto del demonio, a quienes había de castigar, en la Inglaterra victoriana la muchedumbre consideró culpable de su monstruosidad a John Merrick. El Dr. Frederick Treven, un eminente cirujano de la época, lo descubrió y lo protegió hasta su muerte, en 1890 y habló de ese caso en sus memorias que aparecieron en 1923, lo menciona como "una escalofriante criatura que sólo puede verse en una pesadilla. Era la figura de un hombre con las características de un elefante".

Joseph Carey Merrick (Leicester, Inglaterra, 5 de agosto de 1862 - Londres, 11 de abril de 1890) conocido como "El hombre elefante", se hizo famoso debido a las terribles malformaciones que padeció desde el año y medio de edad. Condenado a pasar la mayor parte de su vida trabajando en circos, solo encontró tranquilidad en sus últimos años de vida. A pesar de su desgraciada enfermedad, sobresalió por su carácter dulce y educado. La mayor parte de su vida se pensó que carecía de inteligencia, pero, con el tiempo demostró que la tenía, y superior a la media. Padeció síndrome de Proteus, el suyo, podría representar el caso más grave conocido hasta el momento.

"A veces pienso que mi cabeza es tan grande porque está tan llena de sueños", solía decir Merrick. "¿Saben lo que sucede cuando los sueños no pueden salir?".

"Concluyo que lo hemos pulido como a un espejo, y gritamos aleluya cuando nos refleja a la perfección", decía su médico.

El dramaturgo estadounidense Bernard Pomerance tomó el caso y escribió El hombre elefante que se presentó en Broadway en 1979. La obra transcurre en Londres y Bélgica entre los años 1884 y 1901 y está basada en la vida de Joseph Merrick y su relación con el Médico Frederick Treves quién lo toma a su cargo con un interés científico. Merrick, con un severo caso de neurofibromatosis, macrocefalia y Síndrome de Proteus, nació con esta deformidad, lo cual lo llevó a ser exhibido en ferias como parte del espectáculo de fenómenos en Londres.

La obra recibió el reconocimiento de la crítica internacional y se ha presentado en diversos teatros del mundo. Entre sus reconocimientos figuran: Premio Tony, New York Drama Critic’s Award (por mejor obra de teatro), premio Obie Award (mejor obra de teatro) y el Drama Desk Award (mejor obra de teatro).

En Broadway, artistas tan diversos como David Bowie y Mark Hamill le siguieron al fascinante Philip Anglim en el papel protagónico. En 2002 se realizó una reposición, y otra en el 2014 que recibió cuatro nominaciones al Tony. Hurt protagonizó la adaptación cinematográfica dirigida por David Lynch y protagonizada por además de Hurt, Anthony Hopkins, Anne Bancroft, y John Gielgud, entre otros.

El guion fue adaptado por Lynch, Christopher De Vore, y Eric Bergren de los libros El Hombre Elefante y otras reminiscencias (1923) de Sir Frederick Treves El Hombre Elefante: Un Estudio de la dignidad humana (1971) de Ashley Montagu. Se rodó en blanco y negro. La película fue un éxito crítico y comercial.

En 1981 El hombre elefante llegó al escenario del teatro Manolo Fábregas, dirigida por el mismo estelarizada por Rafael Sánchez Navarro, el propio Fábregas, Adriana Roel y Martha Zamora entre otros.

En su momento la relevante crítica Malkah Rabell en su columna, “Se alza el telón, escribió: “Con semejante tema, con semejante personaje un autor dotado de un temperamento menos autodominante, más estridente, pudo fácilmente caer no sólo en el melodrama más pavoroso, sino hasta en el Gran Guiñol. Bernard Pomarance mantuvo hasta tal punto una permanente sobriedad, un tono menor para todas las vivencias de este horrible caso absolutamente verídico, que nunca llegó ni al melodrama, ni siquiera al drama, sino más bien al documento. Veinte años de antiteatro, acostumbró a la dramaturgia moderna a toda clase de libertades creativas. Por lo mismo, todo lo que se antoja poco teatral en esta obra de Bernard Pomarance no es más que contrario al teatro tradicional, pero perfectamente admisible en la moderna dramaturgia, con su falta de acción, con sus parlamentos dirigidos al público, con su lentitud rítmica, y sobre todo con este personaje central que nunca lleva al realismo su desgracia, física; sino que la deja imaginar a través de actitudes plásticas.

El hombre elefante, un terreno dramático poco familiar: un drama, un documento, una obra social muy extraña, poco común.

En el 2000, el desaparecido Fred Roldán realizó una adaptación del tratado del Dr. Frederick Treves y monto en su teatro. El hombre elefante, el musical, que nada tuvo que ver con la producción de Manolo Fábregas ni con la película de David Lynch, se basó en la investigación minuciosa que el Dr. Treves, hombre de ciencia, realizó en aquella época.

En 2018, con dramaturgia de Mario Conde, Abigail Espíndola ofreció un unipersonal con títeres sobre una de las historias más conmovedoras del siglo XX, para mostrarnos o recordarnos esta oscura tragedia.

Ahora toca turno a la Compañía francesa Midi retomar la historia de Merrick en el Teatro de las Artes, del CENART.

El hombre elefante es un himno al amor, un elogio a la belleza de la humanidad con todas sus formas y todas sus diferencias; un espectáculo que cuenta, de una manera diferente, esta historia fascinante, trágica e increíblemente bella.

El hombre elefante de la compañía Midi, se ha presentado en el Festival de Avignon 2021, de Francia, así como en giras por el país y una temporada en París en enero y febrero de 2020.

En Líbano ofreció 10 funciones.

En nuestro país, además de su estreno en el Teatro de las Artes se presentará una versión infantil en el Maratón de Teatro para niñas, niños y jóvenes en el Centro Cultural del Bosque del INBAL.

El hombre elefante es dirigida por Antoine Chalard, con la asistencia de Elena Gore. El elenco está conformado por Gabriela Betancourt, Antoine Chalard, Florent Malburet, Leopoldo Bernal y Esperanza Penagos.

La compañía Midi cuenta con 20 años de trayectoria. Ha creado 18 espectáculos, con alrededor de 2 mil funciones en Francia y además ha participado en 18 emisiones del Festival de Avignon. Se dedica a montar obras de autores que defienden valores políticos y humanistas, así como espectáculos para niños.

Su objetivo principal ha sido trabajar en el extranjero con personas de otras culturas. Así, ha realizado muchos intercambios teatrales en distintos países como España, Líbano, Marruecos, Turquía, China, Singapur, Alemania, Suiza, la Guyana francesa, la Isla de la Reunión y México. Específicamente en México la compañía ha colaborado con el Festival Internacional de Mérida, Yucatán; IFAL México, el Sistema de Teatros de la Ciudad de México, Teatro UNAM, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura; y en 2015 realizó un intercambio entre México y el Teatro de Cergy, Francia.

Desde 2012, la compañía Midi creó un elenco franco-mexicano con el que ha presentado distintas obras de teatro como Las bodas de Rosita de Federico García Lorca, Terror y miseria del tercer Reich de Bertolt Brecht y La niña y el violín a partir del cuento de Charles Dickens. Al mismo tiempo, la compañía imparte talleres de teatro en francés o en español con niñas y niños, adolescentes, adultos y profesionales del teatro.

¡No soy un animal! ¡Soy un ser humano! ¡Soy una persona!”, clama con dolor Merrick. Este grito de humanidad es el llamado que trasciende a nuestros días, la exposición, ahora en los pantanosos terrenos digitales, de personas con defectos, enfermedades, o que simplemente sean diferentes a nosotros, para asombrar, conmover y obtener algún beneficio propio no se ha erradicado.

De manera poética, retomando la esencia del teatro con los mínimos recursos utilizados, adecuado vestuario, una iluminación cálida para una historia oscura, mínimos, pero necesarios, elementos escenográficos y actuaciones impecables, ofrecen una reproducción exacta de la apariencia física de Merrick por medio de una máscara. El hombre elefante habla, desde la naturaleza del teatro, de la dignidad humana.




El teatro es de todos. ¡Asista!


Absolutamente recomendable.


El hombre elefante.

Dirección: Antoine Chalard.

Actuación: Gabriela Betancourt, Antoine Chalard, Florent Malburet, Leopoldo Bernal y Esperanza Penagos.

Teatro de las Artes del Centro Nacional de las Artes. Tlalpan y Churubusco, metro General Anaya.

Jueves y viernes, 20 horas; sábados, a las 19; y domingos, a las 18 horas, hasta el 5 de marzo.

Los boletos tienen un costo de $150 pesos y están disponibles a través del sistema Ticketmaster y en las taquillas del Cenart. Para más información consulta cenart.gob.mx



29 visualizaciones0 comentarios
bottom of page