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Alterar a quien se sienta cómodo. Texto y fotos: Salvador Perches Galván.



David Foster Wallace, el gran observador de la sociedad actual, fue un escritor estadounidense, considerado uno de los exponentes más brillantes e influyentes de su generación. Su novela más conocida, La broma infinita, fue elegida por la revista Time dentro de los 100 mejores libros entre 1923 y 2006. Se suicidó en 2008, aquejado por una fuerte depresión. Diez años antes había escrito La persona deprimida es uno de los 23 episodios que conforman el controvertido libro Entrevistas breves con hombres repulsivos, el libro completo fue llevado al cine por el director John Krasinski.

La persona deprimida narra en tercera persona el devenir de una mujer con depresión patológica. Cuenta la relación con su analista y con sus padres, que según ella son la base de sus traumas. También describe el particular método terapéutico propuesto por su analista, lo que llama “el círculo de ayuda”: un grupo de personas de su confianza que ella puede llamar en cualquier momento para contarles sus pensamientos y emociones. Así, el relato avanza internándose, sin límites, en detalles de una intimidad lacerante y alcanzando expresiones de profunda humanidad que exceden la descripción de la enfermedad, y dejan entrever un susurrante pedido de ayuda. Daniel Veronose lo adaptó al teatro y posteriormente lo dirigió con gran aceptación del público en Argentina, y ahora, La persona deprimida, en una brevísima terapia de solo cuatro sesiones, expones su problemática al público mexicano.

El montaje conforma, junto con Encuentros breves con hombres repulsivos, también de Foster Wallace y Los arrepentidos, del dramaturgo sueco Marcus Lindeen, la trilogía Experiencia, del director argentino: tres obras que, con distintos mecanismos, buscan introducir al espectador en temas socialmente ásperos, contrastantes con la cotidiano, pero cercanos; incómodos, íntimos y familiares. Lugares donde no siempre es fácil sumergirse.

La serie Experiencia intenta, decia Wallace, “reconfortar a quién está alterado y alterar a quien se sienta cómodo.”

Son un llamado angustiante y amoroso a la aberrante hipocresía que nos gobierna a los seres humanos. Visitar estos territorios nos expone frente a lo que somos, a lo que decimos ser y mentimos ser.

Daniel Veronese es un referente de la escena teatral latinoamericana. Nacido en Argentina en 1955, es autor, adaptador, actor y director teatral, uno de los miembros fundadores del grupo de teatro experimental El Periférico de Objetos, creado en 1989. Entre sus últimas obras destacan La última sesión de Freud, Sonata otoñal, Bona Gent (en Barcelona), Bajo terapia (versión argentina, madrileña, catalana y limeña); Los corderos, Vigilia de noche e Invencible (en Madrid). En México, entre otras, ha montado Mujeres soñaron caballos, ¿Quién le teme a Virginia Wolf? y Codicia., todas ellas con la complicidad de Arturo Barba, actor y productor propositivo, y necio, como el mismo lo dice, necedad que, quienes amamos el teatro agradecemos, particularmente en estos difíciles momentos.

¨Disculpame si te estoy distrayendo de tu vida activa, vibrante, libre de angustia y ubicada a larga distancia...¨Afirma La persona deprimida en este vasto retrato sobre el estado anímico de una mujer. Persona que se limita a describir las circunstancias, tanto pasadas como presentes, que componen su angustia, y la imposibilidad de manifestar o compartir ese dolor. Dolor que nos acerca a lo humano.

Con una impresionante trayectoria a cuestas Carolina Politi da vida a La persona deprimida, a lo largo de 60 minutos hace un recorrido de vida por esta enfermedad, por aquellos conflictos íntimos que devinieron o potenciaron el trauma, como la separación paterna, la pelea por no pagar la ortodoncia infantil, la conformación de un círculo de ayuda a quien acudir en caso de urgencia, el suicidio del terapeuta, la culpa, nuevamente la culpa y finalmente la culpa.

Carolina Politi, destacadísima actriz, vestida de negro y con solo una silla a su espalda, tan solo con su voz y expresiones, su lenguaje corporal y facial, con el movimiento de sus manos, mantiene la atención del espectador, sobre una historia complejamente construida, a la que ella aporta profundidad, empatía y sutileza.

El montaje se escenifica de tal forma que se interna sin límites en detalles de una intimidad lacerante, alcanza expresiones de profunda humanidad que exceden la descripción de la enfermedad y dejan entrever un susurrante pedido de ayuda, de acuerdo a la crítica especializada.

En su narrativa por los fondos de la mente, hay una sutil pero inevitable transferencia del autor al espectador, por lo que es casi imposible no salir perturbado, interpelado, tras visitar esos territorios tan ajenos y a la vez, cercanos, dice Veronese.

“Visitar estos territorios nos expone frente a lo que somos, a lo que decimos ser y mentimos ser, pues frente a la imposibilidad de hablar del sol, una persona deprimida apenas puede señalar las sombras que ve en el suelo”, afirma el fundador de El Periférico de Objetos.

En estos momentos en los que se han potencializado el aislamiento, el temor, la desconfianza, resulta imprescindible atestiguar la terapia de La persona deprimida, porque habla de temas de una actualidad devastadora, como la depresión endógena, los tratamientos psiquiátricos, la terapia psicológica y sus derivados: aristas relacionadas con la salud mental que todavía son tabúes en una sociedad empeñada en alcanzar la felicidad a toda costa. El texto también habla de la soledad, el abandono, la crueldad y la falta de empatía social.

Profundiza, con inteligencia y humor, en zonas poco glamorosas de la humanidad de las personas. En el caso, La persona deprimida, una mujer agobiada por la angustia, pero que se siente incapaz de compartir ese dolor.


El montaje es una producción de las compañías En llamas Producciones, de Barba y Timbre 4, cuya directora residente es Rosa María Bianchi.

Para conocer la programación de la Dirección del Sistema de Teatros de la Ciudad de México, visite las redes sociales: Facebook @TeatrosCdMexico, Twitter @TeatrosCdMexico e Instagram @teatroscdmexico.




El teatro es de todos. ¡Asista!


Absolutamente recomendable.


La persona deprimida

De: David Foster Wallace, adaptación de Daniel Veronese.

Dirección: Daniel Veronese.

Actuación: Carolina Politi

Teatro Benito Juárez. (Villalongín 15, colonia Cuauhtémoc, cerca del Metrobús Reforma).

Hasta al 22 de agosto de 2021. sábado a las 19 y domingo a las 18 horas.

Localidades: $168 pesos. Descuentos habituales en taquilla con credencial vigente. De venta en taquilla del teatro y ticketmaster.

Aforo al 50% de la capacidad de público del Teatro. Con las disposiciones del semáforo epidemiológico vigente: uso permanente de cubre-bocas, gel anti-bacterial y registro de código QR por parte tanto del personal del teatro como de los espectadores.



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